Perfumes para el Día de la Madre

El Día de la Madre es una de las ocasiones en las cuales más se presta regalar flores y perfumes. Su aire primaveral invita a los ramos florales y a otros matices intemporales. Grandes clásicos para revisitar, novedades para dejarse tentar, declinaciones inspiradas, o algo más confidencial … La selección Osmoz lo tiene en cuenta todo.

Nada mejor que una cascada de flores para dejarse arrobar por la plenitud del buen tiempo. El último gran femenino de Hermès, Jour, se declina en una versión más frutal con mucho albaricoque en el Absolu. Este perfume de notas floridas abstractas donde, con todo, se adivina a la gardenia, se enriquece con una luz diurna, más tornasolada y con una plenitud más carnal. De una feminidad total, celebra a la primavera con esa elegancia que caracteriza a las creaciones de la marca.

Joy Forever de Jean Patou brinda una alternativa perfecta a las que deseen refrescar su vestuario olfativo sin por ello renunciar a un cierto clasicismo. Interpretación contemporánea del mítico Joy de los años 30, este nuevo perfume propone una visión moderna de su antecesor respetando al mismo tiempo los códigos de la marca, dejando de lado el atractivo fácil de la gula para llegar más a los jóvenes. El acorde de rosa y jazmín del original se codea ahora con el azahar y aprovecha el encanto juvenil del terciopelo del melocotón y de las notas limpias de los almizcles blancos para volverse más actual.

Algunos éxitos son verdaderamente geniales. La magia de un nombre que encarna el romanticismo de la ciudad luz, la ternura armoniosa de una composición… Paris d’Yves Saint Laurent es de esos perfumes de leyenda inolvidables que evocan inevitablemente a la “mamá””. Quintaesencia de la feminidad, la rosa se vuelve empolvada  al lado de la violeta. Algunos toques especiados condimentan a penas la dulzura de esta fragancia que se funde en una madera de sándalo cremosa. Es de notar que todos los años salen a la luz declinaciones diversas en torno a la rosa para variar los placeres...

¡Qué bueno es dejarse sorprender con un perfume que sale de los circuitos de distribución habituales, promesa de descubrimiento y de singularidad! Es el caso de la gama de los Exclusifs de Chanel, donde el reciente 1932 ilustra el año en que Coco inauguró una exposición de joyas con diamantes. Difundiendo el resplandor de la piedra preciosa, esta fragancia posee la claridad blanca del jazmín y la luz cristalina de la pera, para destacarse este año en una versión extracto, enriquecida con el toque empolvado del lirio.

O tal vez desees regalar una vela perfumada para el día de la madre. Si es así, Un Air de Parfum propone para la ocasión colores femeninos (blanco, malva, fucsia o rojo) para vestir al perfume que hayas escogido entre los diez de la colección. Un regalo único con la inscripción de tu mensaje personalizado en la etiqueta.